
Da mucho miedo este futuro, porque es tan rematadamente parecido a nuestro presente, a lo que se configura ya como un escenario de terrorismo, represión a la inmigración ilegal, grupos antiglobalización y estados autoritarios, que uno ve esta película desesperanzado. Me quedo yo con la magnífica ambientación de unas ciudades que reflejan a la vez todas las guerras del siglo XX y XXI. Veo en esas ciudades sitiadas un reflejo de Sarajevo, Mogadiscio, Berlín, Bagdad, Gaza, con francotiradores que matan a la gente como conejos, ejércitos que parecen mercenarios, y muertos anónimos que no importan a nadie. Alfonso Cuarón, no sé si por ser mexicano, ha sabido retratar perfectamente el cáos de la guerra constante, la imprevisibilidad de la muerte en medio de la vida, a veces creía estar viendo un reportaje, un documental, o una pelicula latinoamericana sobre los peores tiempos de la dictadura argentina. Muy bien hecha, muy bien interpretada, la cámara en mano te hace estar dentro de la historia, sufriendo con el personaje. Me recuerda un poco a aquella que pasó sin pena ni gloria hace años sobre la guerra de Bosnia, Saviour, y que habla de lo mismo, un hombre duro con principios que tiene que salvar a una mujer embarazada. El final de Hijos de Lo Hombres, aunque me lo esperaba, me deja algo frío. Creí escuchar a la soprano de las obras de Arvö Part en la banda sonora, muy apropiada.
Comentarios
Te deja un poco con el cuerpo malo!
Por cierto, no sé que teneis en contra de un futuro/presente apocalíptico como éste!! Con lo que mola!! En serio, ya es hora de un presente que nos salte a la cara y nos diga: No más mentiras! Sobrevive ahora porque vas a morir!!