En Córdoba donde yo nunca viví en realidad,.. pero dicen en aquel lugar que podían encontrarse con mi sombra, un susurro, una leyenda, un espectro solitario. Vayamos por partes. Supongamos que yo nunca existí, aunque sin embargo estoy contando esta historia, un trabajo oculto que debo realizar en el mundo de los vivos para encarnarme y poder vivir una vida auténtica. Esa labor escondida trata de ayudar a personas que soñaron conmigo y en esas tinieblas nocturnas creyeron que eran parte de mi familia, amigos o conocidos. Imaginad una ambientación gótica y tenebrosa en una ciudad del sur, supuestamente luminosa y calurosa, pero fría, glacial y azul como la muerte en el film. El tono no es melancólico ni triste en exceso, ya que esa no-existencia debe reflejarse de manera irónica y escéptica. No aparezco como un no-muerto, nisiquiera como una vampiro andaluz. No, soy como ese nombre que les suena de oídas a la gente, como alguien que dicen recordar pero que nadie sabe qué fue en realidad ...