Cinèma Geneviève

UNDERWORLD:LA REBELIÓN DE LOS LICÁNTROPOS es un muy entretenido ejercicio de fantasía heróica enérgica y visceral, (con un brío y concreción similares a los exhibidos recientemente en otra peli del género, OUTLANDER, con la que comparte algunos responsables) con un punto oscuro de acero y mazmorras que enlaza coherentemente en su tono con las primeras entregas de la (por ahora) trilogía y elude en su leve trazado romántico (muy guerrero) cualquier ñoñería cursi. Para eso ya está la saga Crepúsculo. Una continuación (precuela, que amplía y mejora los flashbacks de las pelis anteriores) tan innecesaria y tan refrescante como las de Terminator o Alien, pero sin su barniz de clásicos modernos ni megapresupuestos omnipresentes. Un disfrute.

GRAN TORINO es una experiencia agridulce, un cuento con un héroe sobreexplicado que ingenuamente puede sacrificarse con dignidad por los demás y marcar la diferencia de forma útil, lo que dá a la historia un carácter creíble pero para nada realista, ya que está situada en la actualidad y no en western irreal. El personaje de Eastwood y su relación con los demás se perfila a la perfección, quedando demasiado evidente su discurso y sus matizes similares con personajes anteriores y populares de su cine (como actor): El pistolero cansado y enfermo de Sin Perdón, el agente traumatizado de En la Línea de Fuego, el racista megaduro de Harry el Sucio, el solitario patético de Bronco Billy o el Aventurero de Medianoche, el héroe de barrio de La Gran Pelea. Como curiosidad se me antoja el subjetivo paralelismo entre Eastwood como una versión "inversa" del Sensei señor Miyagi de la saga Kárate Kid (Dar cera, pulir cera, pero a su modo,..occidentaliza en lugar de orientalizar). También