Os recomiendo que os vayáis del cine después del descanso de The Brutalist , porque la peli empeora y se ríe de vosotros. No es una cinta sobre arquitectura, ojalá hubiera tratado sobre la Bauhaus y el Brutalismo. Es pretenciosa aunque a su favor puedo decir que tampoco aburre. Si queréis ver una película buena húngara sobre el Holocausto, ved El hijo de Saúl o El Pianista , de Polansky , que duran menos, son más concretas y salís estremecidos de la sala. El Brutalista la ha hecho un director bruto que se piensa que le van a salir obras de arte.
Blog de películas, en una época en la que ya nadie lee blogs y donde no se sabe si el cine se seguirá proyectando en salas o sólo en plataformas, tabletas y teléfonos móviles.