Rhona Mitra. Al margen de Virginia Madsen , la actriz principal de El Número 23, y una de mis favoritas de la genuina serie B, desde los tiempos de Candyman (por el que la premiaron en Sitges ), Angeles y Demonios o el clásico infumable de Los Inmortales 2, aparte de hermana del imprescindible Michael Madsen , la chica que casi pasa desapercibida en la peli de Jim Carrey es Rhona Mitra, otro de mis mal llamados mitos privados (porque soy poco dado a ellos). La recuerdo en el Simo (la Feria Informática de Madrid), vestida de Lara Croft y cantando los temas de su disco, una rareza tecno pop producida por Dave Stewart que compré años después en una tienda de segunda mano. La recuerdo, como no, en las fotos de promoción de los videojuegos de Tomb Raider . Después, en la fallida Beowulf con el gran Christopher Lambert , lanza en mano. De ahí a fantasía perversa de Paul Verhoeven y víctima del Hombre Sin Sombra, en apariciones estupendas en Get Carter con Stallone y...
Blog de películas, en una época en la que ya nadie lee blogs y donde no se sabe si el cine se seguirá proyectando en salas o sólo en plataformas, tabletas y teléfonos móviles.