Lo mejor de
GAMER son sus lúcidos destellos de sátira grotesca y cruel. La recreación de
SOCIETY - algo así como un híbrido perverso de
SECOND LIFE y LOS
SIMS con personas reales como peleles de los usuarios - se me antoja más repugnante e inmoral que
SLAYERS el juego de combates a muerte (de guerrilla) en el que participa el protagonista. Después de todo, hemos visto su premisa de deporte sangriento/
reality show tantas veces incluso desde antes de
ROLLERBALL (la original de los 70), que su mayor aporte es el de la espectacularidad inicial de su violencia que pierde fuelle a lo largo del desarrollo de la historia, que por lo demás remonta en interés hasta un final flojo, que destaca quizás por algún puntual hallazgo como los diálogos entre el jugador y su "avatar" o los enredos de identidades
superpuestas en el rescate de una "actriz" de
SOCIETY.
¿Os
imagináis hablar con el
SPARTAN 117 Jefe Maestro de HALO en mitad de la partida? Seguramente se cagaría en mis muelas por dirigirlo con semejante torpeza...
Lo mejor de GAMER son sus lúcidos destellos de sátira grotesca y cruel. La recreación de SOCIETY - algo así como un híbrido perverso de SECOND LIFE y LOS SIMS con personas reales como peleles de los usuarios - se me antoja más repugnante e inmoral que SLAYERS el juego de combates a muerte (de guerrilla) en el que participa el protagonista. Después de todo, hemos visto su premisa de deporte sangriento/reality show tantas veces incluso desde antes de ROLLERBALL (la original de los 70), que su mayor aporte es el de la espectacularidad inicial de su violencia que pierde fuelle a lo largo del desarrollo de la historia, que por lo demás remonta en interés hasta un final flojo, que destaca quizás por algún puntual hallazgo como los diálogos entre el jugador y su "avatar" o los enredos de identidades superpuestas en el rescate de una "actriz" de SOCIETY.
¿Os imagináis hablar con el SPARTAN 117 Jefe Maestro de HALO en mitad de la partida? Seguramente se cagaría en mis muelas por dirigirlo con semejante torpeza...
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