Después del subidón de FAST FIVE llega FURIOUS 6, como precedente a la inminente séptima entrega. Justin Lin, auténtico revitalizador de una franquicia que parecía muerta tras sus mediocres dos primeras entregas, abandona la saga (tras estar al frente de las últimas cuatro) con este film que deja el listón muy alto, cerrando el círculo que dio comienzo a su dirección de las pelis de FAST & FURIOUS en la tercera entrega, TOKYO RACE, con un epílogo en esta que sella el conocido destino de Han y su historia, y marca el camino a seguir al siguiente capítulo. Muy hábilmente, porque aquella secuela tokyota sin el casting estelar de la saga, que pudo ser obviada en el retorno de Diesel y los demás a la franquicia, se ha convertido en realidad en el eje que vertebra la historia, sobretodo cuando incorporó a Han en el reboot que supuso la cuarta entrega habiendo muerto su personaje en la tercera. El carácter de precuela que han tenido las siguientes pelis desde entonces han marcado un plus de más para el seguidor de todos los capítulos, sabedor que por mucho que se pospusiera el destino de Han en Tokyo, este llegaría finalmente, y eso lo hacía más relevante y trágico de lo que fue inicialmente.
El villano del retorno a Tokyo de FAST & FURIOUS 7 será otra estrella del cine de bólidos y tollinas, un poco más europeo. Pensad un poco y lo adivináis, que no es difícil.
La acción, localizada en las Islas Canarias y Londres mayormente, es sencillamente impresionante y trepidante, épica. The Rock y Vin Diesel llegan a enfrentarse a un tipo tan grande como ellos dos juntos. Todo es más. El argumento, aunque conseguido, empieza tal vez a resentirse de la acumulación de continuidad de los films precedentes, que pese a ser uno de sus alicientes complica tal vez demasiado la historia, que suele ser más sencilla. La escena del tanque en España, fruto del asalto a un convoy de una base de la OTAN no tiene precio.
Con la incorporación de tanto personaje molón, digna de LOS MERCENARIOS de Stallone y muy superior en resultados salvo por el factor nostalgia y tipiqueo de aquellos, propongo un spin off a la longeva franquicia, llamémoslo FURIOUS FORCE, protagonizado por la fuerza policial de choque de The Rock, con Elsa Pataky y Gina Carano (Sí, también). Y con Eva Mendes, que hizo un breve cameo en la quinta entrega como poli ultrasexy.
Han & Gisele, al final....Tokyo.
Después del subidón de FAST FIVE llega FURIOUS 6, como precedente a la inminente séptima entrega. Justin Lin, auténtico revitalizador de una franquicia que parecía muerta tras sus mediocres dos primeras entregas, abandona la saga (tras estar al frente de las últimas cuatro) con este film que deja el listón muy alto, cerrando el círculo que dio comienzo a su dirección de las pelis de FAST & FURIOUS en la tercera entrega, TOKYO RACE, con un epílogo en esta que sella el conocido destino de Han y su historia, y marca el camino a seguir al siguiente capítulo. Muy hábilmente, porque aquella secuela tokyota sin el casting estelar de la saga, que pudo ser obviada en el retorno de Diesel y los demás a la franquicia, se ha convertido en realidad en el eje que vertebra la historia, sobretodo cuando incorporó a Han en el reboot que supuso la cuarta entrega habiendo muerto su personaje en la tercera. El carácter de precuela que han tenido las siguientes pelis desde entonces han marcado un plus de más para el seguidor de todos los capítulos, sabedor que por mucho que se pospusiera el destino de Han en Tokyo, este llegaría finalmente, y eso lo hacía más relevante y trágico de lo que fue inicialmente.
El villano del retorno a Tokyo de FAST & FURIOUS 7 será otra estrella del cine de bólidos y tollinas, un poco más europeo. Pensad un poco y lo adivináis, que no es difícil.
La acción, localizada en las Islas Canarias y Londres mayormente, es sencillamente impresionante y trepidante, épica. The Rock y Vin Diesel llegan a enfrentarse a un tipo tan grande como ellos dos juntos. Todo es más. El argumento, aunque conseguido, empieza tal vez a resentirse de la acumulación de continuidad de los films precedentes, que pese a ser uno de sus alicientes complica tal vez demasiado la historia, que suele ser más sencilla. La escena del tanque en España, fruto del asalto a un convoy de una base de la OTAN no tiene precio.
Con la incorporación de tanto personaje molón, digna de LOS MERCENARIOS de Stallone y muy superior en resultados salvo por el factor nostalgia y tipiqueo de aquellos, propongo un spin off a la longeva franquicia, llamémoslo FURIOUS FORCE, protagonizado por la fuerza policial de choque de The Rock, con Elsa Pataky y Gina Carano (Sí, también). Y con Eva Mendes, que hizo un breve cameo en la quinta entrega como poli ultrasexy.
Han & Gisele, al final....Tokyo.
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