"- Me siento rasgada, ocupada, violentada, mi cuerpo ya ha dejado de ser sagrado..me han rajado por dentro.."
El embarazo, la maternidad, el parto, el amamantamiento, la crianza. La medicalización, la artificialidad, la tecnología al servicio del feto, las nuevas sectas de lo natural, volver a lo antiguo, el parto íntimo en casa, o en el agua, o sin ocitoxina, sin epidural, dar el pecho hasta que el niño quiera, en grupo o en soledad. La tradición femenina de las madres que ya no sirve, porque tu madre ya no estaba conectada con la sabiduría "ancestral", tu abuela quizá fue la última depositaria de la cultura rural que "sabía" como enfrentarse a esa etapa de la vida, como a la muerte, el otro ciclo. Y después está tu papel en la sociedad, el mundo laboral que no te espera, que no te valora, te respeta como madre, incluso te sacraliza, pero que no te dignifica como "profesional". Y los hombres, ay estos inútiles que se quitan de enmedio, o que te dicen que "colaboran" ó "ayudan" como asistentes más interesados en "cumplir" que en involucrarse de verdad. La mujer tiene que "madurar" a la fuerza, casi violentamente, hasta caer agotada, porque piensa que tiene que hacer bien su papel. Pero la manera de criar a tus hijos es una decisión personal, distinta y singular. Tendrás éxito y fracasarás sin apenas saber cómo. Te han reventado por dentro para traer a "otros" a este mundo, de repente te has conectado con la Vida, con la animalidad más absoluta, la sensualidad, la ternura, la emoción y la sabiduría.
Ser madre como uno de los papeles que decides tener en esta existencia, no el único rol, pero sí absorbente durante la mayor parte de tu presencia en el planeta.
Son muchos motivos, suficientes para caer en la Secta de la Maternidad. Nadie lleva una brújula encima, nisiquiera aunque existan libros, programas de televisión, o hasta una película francesa como ésta. La autora del libro en que se basa el guión parece querer decirnos : Las mujeres, cuando parimos, estamos mejor sin los hombres cerca y manteniendo bien lejos a nuestras madres y suegras. Quiero estar sola con mi hij@ y aprender por mí misma, ya pediré ayuda cuando la necesite. Algo muy íntimo y personal.
**Y descubrir a la jóven actríz gala Louise Bourgoin, en las fotos de más arriba
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