SLASHER ACTIVITIES:I . Una Chica y su Hacha.
En PARANORMAL ACTIVITY menos es más. Usando los mínimos recursos en torno a un sencillo argumento apuntalado con decisión, obtiene los mejores resultados. Es el equivalente doméstico a lo que EL PROYECTO DE LA BRUJA DE BLAIR fue en un entorno rural, pero posiblemente con mayores posibilidades para la secuela que ha estrenado recientemente. Entiendo a los detractores de la película, quizás por su abrupto final o porque pueda resultar anticlimático el que no aparezca finalmente el tan esperado exorcista o demonólogo, pero gracias a sus críticas, que rebajan mis expectativas, para mi son todo aciertos en esta cinta que se me pasa volando pese a su dilatado metraje. Quizás no fuera así de haberla visto en una sala de cine en lugar de en el DVD, aunque la Bo. subtitulada posiblemente le aporte aún mayor credibilidad, que contribuye al interés del espectador también utilizando hábilmente la aparente falta de buen juicio de sus protagonistas en determinadas situaciones insostenibles. Pero como en un dramatización del programa de TV CUARTO MILENIO, recordad que el ente actúa para la cámara, y sin ella no hay Heli. Veré su segunda parte, sobretodo teniendo en cuenta que parece continuar la historia que comienza aquí, aunque posiblemente lo haga también en DVD.
HERMANDAD DE SANGRE (SORORITY ROW) es un Slasher que, pese a no tratarse aparentemente de ningún remake, es tremendamente fiel a las premisas clásicas del género, sobretodo al estilo popularizado por SCREAM en los 90, esto es, asesino impersonal encapuchado cuya identidad varía en cada entrega, acercándose un tanto al policiaco de "¿Quien será el asesino?", de estilo más gayo ten americano y marcando alguna leve distancia con el más carismático supersicópata tipo Jason de Viernes 13 o Freddy Krieger, cuya fórmula se encontraba agotada cuando la trilogía SCREAM de Ges Claven (con una cuarta entrega que se estrenará pronto) dio un revulsivo al terror de Hollywood antes de que los remakes de cine foráneo o anterior y los tipos grandes con hacha de la America profunda volvieran con renovadas fuerzas en esta década, que tiene cabida para un aluvión de todas las vertientes del terror, desde los zombis hasta los fantasmas y por supuesto, los asesinos blazers.Si algo destaca en SORORITY ROW además de su sincera fidelidad, es su tono satírico hasta rozar lo paródico, donde casi todas las chicas (también los chicos) de la hermandad universitaria protagonista son tan criminales como el asesino en serie que las persigue. No hay buenos, y sí muchos malos en esta peli, lo que distancia al espectador de empatizar con ellos cuando los van eliminando a la manera de Darío Argento, que podría haber sido el diseñador de la tan característica arma afilada.
II . Un Chico y su ataud.Qué puedo añadir a lo ya dicho sobre BURIED -ENTERRADO-: Emocionante, intensa,...perfecta.
En JÓVENES OCULTOS 3:SED DE SANGRE -Lost Boys The Third- Corey Feldman encarna de nuevo a Edgar Frog, esta vez como protagonista absoluto, aunque formando equipo junto a su también desastroso hermano Alan, y una dependienta de la tienda local de cómics, una estrella trasnochada de realitys y una escritora de novelas románticas de vampiros moñas, lo que sirve de cómica reflexión sobre cómo el paso del tiempo ha transformado la imagen popular del vampiro en el cine desde los 80 de LOST BOYS a CREPÚSCULO. Esta nueva entrega del revival chupasangres, dedicada a la memoria de Corey Haim, otro de los protagonistas del film inicial que ofreció un breve cameo en la segunda parte, está más conseguida a todos los niveles que su primera secuela, resultando mucho más entretenida, con un argumento disparatado donde los surferos protagonistas, tras limpiar de vampiros las playas de Santa Carla y Luna Bay, deben enfrentarse a unos jefes vampiros Djs en una rave de sangre en San Cazador, llegada directamente desde Ibiza. Los tiempos cambian y los vampiros emo aniñados son adorados por todos excepto por esta pareja de hermanos anclados en un síndrome de Peter Punk-grunge sin responsabilidades ni ambiciones de cambio, como el viejo número 14 de Batman que Edgar atesora en recuerdo de su amigo desaparecido.
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