
El antaño Monty Python de Hollywood que sacara adelante superproducciones con rutilantes estrellas en su reparto es ahora un francotirador independiente. Diría que desde EL SECRETO DE LOS HERMANOS GRIMM a Terry Gilliam le cuesta más sacar adelante sus proyectos,o al menos algunos de ellos casi no llegan a estrenarse. Pero siempre, entonces y ahora, sus películas han sido rabiosamente personales.
THE ZERO THEOREM no es una excepción. Producida por Reino Unido, Francia y Rumanía y con su protagonista Christoph Waltz implicado como coproductor, es una historia con muchos puntos en común con otras de Gilliam. Podríamos ver en ella una actualización de BRAZIL, si bien THE ZERO THEOREM resultaría aún más terrorífica ya que podemos identificarla sin dudarlo con nuestra realidad actual, a través del espejo imaginativo, poético y deformante que nos ofrece. Individuos prisioneros de sí mismos y su propia incomunicación antes que por el sistema. Waltz ofrece un recital, acompañado por una puesta en escena cuidada, tan teatral como cinematográfica a veces, y un reparto de campanillas.
Matt Damon en un breve papel que recuerda extrañamente a Phillip Seymour Hoffman y Tilda Swinton con un aspecto raramente similar al que presenta en ROMPENIEVES, otra personal odisea futurista opresiva, aportan entre otras colaboraciones sus granitos de arena.

La francesa Mélanie Thierry, vista en las scifi francesas CHRYSALIS y BABYLON A.D.
goza de mayor peso emocional en esta historia que podría ser un capítulo de la teleserie británica BLACK MIRROR pasado por el filtro cirquense de Terry Gilliam, que esperemos siga regalándonos quijotadas como ésta o la también casi desconocida TIDELAND.
Comentarios