WATCHMEN es un disfrute de película que sorprendentemente mantiene el tono adulto (y excluyente para un público infantil) de la obra en la que se inspira. Frente el equilibrio de cine de calidad para todos los públicos de los primeros
SPIDERMAN,
XMEN o
IRON MAN,
aquí una gran campaña publicitaria arropa una producción multimillonaria de mayor carga profunda y complejidad, como ocurriera con el
HULK de
Ang Lee,
SUPERMAN RETURNS y EL CABALLERO OSCURO. Ahora, igual que en aquellas ocasiones ( donde
HULK y
SUPERMAN RETURNS fueron éxitos modestos y mucho menores a las expectativas de los estudios, y EL CABALLERO OSCURO un gran
blockbuster), es el público el que decidirá por el destino en taquilla de la película, y tiene la palabra para abrir la puerta a grandes y diversas historias o limitar el futuro de los héroes americanos de la pantalla a caminos ya muy transitados, aunque agradables de recorrer.
Comentarios